miércoles, 19 de noviembre de 2014

Mi oración para ti esta Navidad




Acostumbro a leer La Palabra Diaria, una publicación de la Organización Unity, cada mañana,  desde hace varios años. Sus mensajes son inspiradores y es sorprendente como expresan, mediante el  uso de las palabras adecuadas y exactas,  aquello que necesito escuchar para proseguir mi día,  confiando en que todo va a estar bien...
Recientemente, me enviaron  un folleto  titulado " La Navidad en mi corazón". Este contiene una oración titulada "Mi Oración para ti esta Navidad", cuyo autor es James Dillet Freeman. La comparto contigo con mis mejores deseos de una ¡Feliz Navidad! 


Mi oración para ti esta Navidad

Que siempre haya espacio en tu corazón
para que la divinidad
encuentre su lugar para nacer.

Que seas santo como lo fueron
los ángeles,
fiel como los pastores,
humilde como el ganado,
sabio como los Reyes Magos.

Que tengas la compasión de María
y el entendimiento de José,
y que la bendición 
del niño Cristo sea tuya, 
no por la noche de su nacimiento
hace mucho tiempo,
¡sino porque su amor nace en ti hoy! 

Amén



sábado, 29 de marzo de 2014

Ideal… ¡Un escritorio despejado y en orden!


Muchas personas concuerdan conmigo en que sería de mucha ayuda para ellos contar con un escritorio de trabajo despejado y en  orden que les facilite concentrarse mejor en lo que hacen y sacar el trabajo más rápidamente.   Entonces, si esto es necesario para alcanzar nuestras metas de trabajo, ¿por qué no puede ser una prioridad mantener ese espacio despejado y en orden?  He aquí algunas de las respuestas que he recibido:
  1.  No tengo tiempo para eso, esa no es mi prioridad…
  2.  Paso demasiado tiempo en reuniones de trabajo; todo está iniciado  y nada terminado por lo que no puedo mover nada de donde está…
  3. Tengo demasiados asuntos importantes que sacar y todos son ‘para ayer’…
  4. Solo yo sé lo que tengo ahí y nadie más puede ayudarme a organizarlo…
  5. Algún día, cuando logre completar todo lo pendiente, sacaré un tiempo para clasificarlo todo…
  6. Como único logro recordar lo que tengo pendiente es si lo veo…

Cuando examinamos con detenimiento estas respuestas es obvio que el problema radica en uno mismo. Nada tienen que ver con la falta de anaqueles, envases, gavetas, archivos o armarios para colocar toda esa cantidad de documentos que usted pueda tener sobre su escritorio así que, me queda muy claro que no siempre el problema es la falta de espacio adicional.

Le puedo asegurar que manteniéndolos sobre el escritorio no va a lograr agilizar todo lo pendiente por el contrario, se atrasa más.  Sin embargo,  si dedica un tiempo,  de su valioso tiempo,  a clasificarlo y a organizar su escritorio  es casi seguro que podrá:
  1. Conocer qué es lo que tiene pendiente.
  2.  Asignar prioridades reales a las tareas pendientes.
  3. Delegar en sus ayudantes aquellas tareas que estos puedan realizar tan bien como lo haría usted.
  4. Descartar o destruir documentos que ya no necesita.
  5.  Archivar los documentos relacionados con aquel trabajo que ya completó

Analícelo bien y pregúntese a sí mismo ¿cuánto tiempo me puede tomar hacer  esto versus todo el tiempo que me tomaría localizar un documento importante de entre todas esas montañas de papel?  Lo más probable es que tratando de localizar ese o esos documentos, su nivel de estrés aumente al descubrir que,  entre todo ese montón de papeles,  hay muchas otras tareas pendientes e igualmente importantes que ni siquiera usted conocía.

Es mucho lo que puede ganar porque estará contribuyendo a que su ambiente de trabajo sea uno agradable; se sentirá más cómodo y podrá concentrarse mejor en su trabajo.  Si se ve en la necesidad de interrumpir su trabajo porque surge alguna reunión importante, le resultará mucho más fácil retomar el trabajo una vez regrese a su escritorio. Estará más consciente de los trabajos que logró completar que de los que tiene pendiente y se sentirá mucho más productivo y  satisfecho con su labor.
  
Así es que, comience por sacar un tiempo (una hora) para despejar su escritorio una vez a la semana.  Si tiene un ayudante de confianza, pídale a esa persona que examine los documentos, los clasifique por temas y luego reúnanse por  media hora para que lo ponga al tanto. Esa seria una magnifica oportunidad para asignar o re-asignar  prioridades,  delegar tareas,  descartar aquello que ya no necesita o archivar aquello que ya completó.  

Hasta la próxima…

domingo, 2 de febrero de 2014

Qué hacer con esas montañas de documentos...




¿Eres de esas personas que poseen montañas y montañas de documentos sobre su mesa o su escritorio? ¿Acaso tienes miedo de colocar todos esos documentos en un lugar cerrado por temor a no volver a verlos? O, ¿será que eres de esas personas que  cree que para que algo exista  tiene que estar a la vista? Si ese es tu caso, la mejor manera de sentirte seguro y desarrollar confianza  de que efectivamente esos documentos todavía existen y están accesibles cuando los necesites,  es establecer un sistema que te permita guardar tus documentos y que  funcione para ti. 

Una opción posible es colocarlos en envases abiertos.  Sin embargo, este tipo de envase no resulta muy conveniente cuando se trata de una gran cantidad de documentos pues podrían ocupar demasiado espacio a menos que los puedas colocar uno sobre otro. Los envases transparentes tienen la ventaja de que el contenido esta visible,  pero nuevamente tienen la desventaja de que a la hora de guardarlos lo recomendable es colocar uno sobre otro lo que puede hacer un poco difícil buscar o localizar un documento a la hora de necesitarlo. 


La mejor  alternativa es hacer uso de archivos, lo cual conlleva establecer un sistema de identificación y clasificación de documentos que se ajuste a tus necesidades. Para fortalecer tu sentido de 'donde están los documentos', es recomendable que de tiempo en tiempo dediques un rato a repasar qué es lo que contiene tu archivo y la forma o manera en que lo has clasificado.  Podrías aprovechar esa oportunidad para actualizar tu archivo y eliminar todos aquellos documentos que ya no son necesarios, revisando cada gaveta, cada sobre y cada expediente. El resultado final será una mesa o un escritorio libre de  "clutter" y un sistema de archivo que te haga sentir seguro y confiado.  

domingo, 5 de enero de 2014