lunes, 25 de julio de 2011

Mantenga su automóvil limpio, ordenado y funcionando adecuadamente...

ver detallesUsted puede estar pensando que su automóvil es simplemente un medio que lo lleva de un lugar a otro. Sin embargo, la realidad es que su automóvil es una casa sobre ruedas con todo lo que usted necesita y desea mientras va por esos caminos… y,  como todo hogar, necesita mantenimiento y cuidados. A continuación algunas sugerencias e ideas prácticas…

1.   Separe unas  horas, cada  tres o cuatro semanas, para vaciar las gavetas, bolsillos de los asientos  y compartimientos de almacenaje de su automóvil. Utilice una caja y coloque en la misma todo lo que encuentre. El próximo paso sería examinar el contenido de la misma. Deshágase de la basura y clasifique el resto (mapas, papeles con direcciones, CDs de música, videos o películas, lápices, bolígrafos, etc.)
2.   Remueva las alfombras y limpie las superficies, asientos y pisos haciendo uso de una aspiradora o escoba pequeña. Luego de haber removido el polvo, limpie las superficies (“dash”, puertas, ventanas, espejos, etc.) con un paño húmedo para asegurarse de remover cualquier residuo que pueda quedar. De igual forma, sacuda las  alfombras y lávelas.
3.   Para asegurar un olor placentero, coloque debajo de los asientos algunos desodorantes para automóvil o sobrecitos de “sachet” con el aroma de su preferencia.
4.   Utilice una o dos  bolsas plásticas (como las que usan en los comercios para empacar nuestras compras) de un tamaño adecuado y colóquelas en lugares accesibles de manera que las pueda utilizar para echar cualquier desecho o basura. Esto le ayudara a conservar las áreas de su  automóvil limpias y en orden.
5.   Si tiene niños, guarde sus juguetes, libros, crayolas, lápices y artículos por el estilo dentro de bolsas plásticas transparentes tipo “ziploc” y colóquelas en los bolsillos que se encuentran en la parte de atrás de los asientos. Si los asientos no cuentan con este tipo de bolsillos, puede adquirir unas bolsas de malla que se adaptan a los asientos con este propósito. Una alternativa a la bolsa de malla son las zapateras de tela.
6.   Coloque dentro de la gaveta (algunos la conocen como guantera) aquellos documentos que necesita tener accesibles de forma rápida incluyendo mapas, manuales del auto, tarjetas o números de teléfonos de servicios de grúa o ayuda en la carretera. Advertencia, nunca coloque en esta gaveta una copia de la licencia  de su automóvil pues, dicho documento posee información personal; protéjase del robo de identidad.
7.   Coloque dentro de una caja plástica con tapa (que quepa debajo del asiento del chofer o del pasajero más cercano al chofer),  una lámpara de mano, una libreta para tomar nota, un lápiz o bolígrafo, guantes desechables, servilletas y algunas bolsas plásticas.
8.   En una mochila o bolso de viaje, coloque una toalla, pijamas, un cambio de ropa, un par de zapatillas y una carterita plástica  que contenga jabón de baño, desodorante, pasta y cepillo de dientes. Todo esto le será de mucha utilidad si por alguna situación de emergencia en la carretera, usted se ve impedido de continuar su camino y necesita pasar la noche fuera de su hogar.
9.   Muy importante, lleve siempre en su automóvil  un abrigo o  una manta pequeña. Puede ser de mucha ayuda, sobretodo si tiene niños,  llevar un "mat" (como los que suelen utilizarse en los gimnasios).
10. Algo muy conveniente es contar con una neverita portátil (las que usamos para la playa) donde pueda colocar alimentos que requieran refrigeración. Si por alguna razón usted no puede ir directo a su hogar luego de comprar sus alimentos entonces,  puede colocarlos  dentro de esta nevera en lo que llega a su hogar y así se conservaran frescos y a una temperatura adecuada.
11. No olvide hacer espacio en su automóvil para colocar algunos equipos muy útiles y necesarios en caso de emergencias tales  como, una máquina portátil  para inflar las gomas (llena gomas)  y una caja con herramientas.
12. Lleve su automóvil a un  Centro de Servicios (mecánica)  con la  frecuencia requerida, según su uso,   para que le hagan el chequeo y reciba el mantenimiento adecuado. 
13. Por último, conserve el tanque de gasolina con un nivel suficiente para atender cualquier situación de emergencia que pueda surgir, sobretodo en las noches.

Hasta la próxima…

lunes, 18 de julio de 2011

El Robo de Identidad y el Fraude…

ver detallesEl tema de esta semana me toca muy de cerca porque yo fui victima de robo de identidad hace un poco más de 3 años. Afortunadamente,  gracias a Dios y a las gestiones de un empleado de una tienda por departamentos, quien detectó ciertas incongruencias en la información de la licencia de conducir que presentó la compradora,  las autoridades pudieron atraparla a tiempo, justo el primer día en que comenzaba a hacer sus compras. En un mismo día y haciendo uso de mi número de seguro social y  de una licencia de conducir falsa que contenía toda mi información personal,  logró que le aprobaran una tarjeta de crédito en la tienda por departamentos con una línea de credito ascendente a $2,500. Más temprano, paso por una joyería y solicito crédito,  pero el mismo le fue denegado porque a la empleada que la atendió le pareció sospechosa su apariencia. Adicional a esto,  se suscribió mediante contrato a los servicios de una compañía de teléfonos celulares con llamadas ilimitadas en y fuera de PR y compró equipo cuyo valor ascendió a más de  $900.

Como les comenté, la persona fue atrapada a tiempo. En el juicio,  se declaró culpable y la sentenciaron a cumplir varios años de cárcel,  con la opción de ser considerada para participar en un programa de rehabilitación mientras cumplía su sentencia,   pues la misma presentaba un problema de adicción a drogas muy severo. Ella nunca declaró el nombre de la o las personas que le facilitaron la licencia falsificada y toda mi información personal, pero por lo que supe durante la investigación,  se trataba de personas que trabajaban en el Departamento de Obras Publicas  y que tuvieron acceso a mi información cuando yo renové  mi licencia de conducir pocos meses antes.

Como pudieron apreciar,  mi caso no se trató de que yo revelara información personal ni por teléfono, ni por la Internet, ni a través de correos electrónicos. Tampoco se trató de que yo perdiera o me robaran la cartera con todos mis documentos. De hecho, yo suelo ser muy cuidadosa con mis documentos personales. Todo ocurrió mientras realizaba una gestión oficial en una agencia de gobierno para renovar mi licencia de conducir. Personas inescrupulosas que trabajaban en dicha agencia de gobierno se prestaron para cometer fraude y emitir licencias falsas.

Aunque yo corrí con mucha suerte porque la persona fue detenida el mismo primer en que comenzó a hacer sus fechorías, les puedo asegurar que la experiencia no deja de ser una muy desagradable. Otras personas no corren con la misma suerte que yo y las consecuencias pueden ser muy graves.  Las victimas de robo de identidad pueden sufrir consecuencias como informes de crédito desastrosos, reducción en su capacidad para cualificar para préstamos o hasta empleos, pérdidas y desembolsos y sobretodo, la inversión de muchas horas de su tiempo para aclarar el problema y limpiar, tanto su crédito como su  nombre.

A continuación, algunos consejos útiles para prevenir el  convertirse en una victima del robo de identidad y del fraude:

  1. Nunca comparta información personal por teléfono, especialmente cuando no es usted quien realiza la llamada. Pregunte a la persona que llama su nombre, el propósito,  el número de teléfono y la compañía para la cual trabaja. Dígale a la persona que usted la va a llamar para   verificar que la información sea verdadera y antes de hacerlo, revise el Directorio Telefónico para corroborar que dicha compañía existe y que se trata del mismo número telefónico.
  2. Nunca responda a correos electrónicos que soliciten información personal sensitiva tales como el número de seguro social o de una  tarjeta de crédito, su dirección residencial, etc.,  aun cuando se trate de correos provenientes de personas que usted conoce o de compañías con las que usted suele hacer negocio. Responda el correo electrónico solicitando que le provean la misma información que le solicitaría a una persona que lo llame por teléfono y corrobore dicha información.
  3. Revise sus estados financieros mensuales para detectar cualquier actividad inusual en sus cuentas. Si tiene acceso a la información de sus estados de cuentas por la Internet,  revise los mismos con frecuencia para asegurarse de sus transacciones fueron registradas por la cantidad correcta.
  4. Guarde todos sus recibos y una vez los haya registrado,  deshágase de ellos de manera que un ladrón no pueda descifrar la información que contienen los mismos en caso de que revise su basura.
  5. Revise,  por lo menos una vez al año, sus reportes de crédito. Usted tiene derecho a solicitar de cada una de las 3 principales agencias (Equifax, Experian y TransUnion)  un reporte de crédito gratis al año.
  6. Congele sus reportes de crédito. Esto le permitirá a usted negar el acceso a sus reportes y antes de proveer cualquier información acerca de su crédito, la agencia necesita obtener su autorización.   Si usted sospecha que está siendo victima de robo de identidad puede solicitar a cualquiera de las 3 agencias mencionadas anteriormente que congele sus reportes de crédito por un periodo de tiempo de 3 meses. Luego de corroborarse que efectivamente usted ha sido victima del robo de identidad entonces,  podrá solicitar que se extienda dicho periodo por varios años.
  7. Mantenga su información personal tales como su número de licencia de conducir, números de teléfono y dirección residencial fuera de sus cheques.
El buen crédito es considerado como uno de los activos más valiosos que pueda poseer cualquier persona así que, ¡Protéjase y Proteja su Crédito!

Hasta la próxima…

lunes, 11 de julio de 2011

A dónde se va su dinero… sígale la pista a sus gastos...

Si es mujer, podría encontrar la respuesta en todos esos recibos de compra que suele ‘archivar’ en su cartera. Si es varón, puede que encuentre alguna  evidencia de sus gastos en los bolsillos de sus pantalones y camisas o en los asientos de su auto. Otra posible alternativa  es examinar cuidadosamente el estado de cuenta de su tarjeta de debito pues resulta muy cómodo y seguro hacer uso de la misma y,  hoy día, se suele utilizar para pagarlo todo…

Una de las razones por las cuales podría estar confrontando problemas financieros, especialmente, si usted  se caracteriza por ser Impulsivo o ser  Osado, es porque gasta demasiado. Para la mayoría de la gente, gastar dinero es mucho más fácil y divertido que ganarlo. Considérelo bien, puede ser muy divertido gastar dinero, pero si gasta demasiado y no sabe a dónde se va su ingreso, está poniendo en riesgo no sólo su futuro, sino también su presente. Los ahorros se van acabando, las deudas se pueden ir acumulando y usted, no podrá  alcanzar jamás sus metas financieras y de retiro. Resultaría mucho más divertido  gastar sin poner en peligro sus   finanzas. ¿Cómo lograrlo? Esto depende de usted, de cuáles son sus metas y de dónde se encuentra financieramente.  En esta etapa, un principio básico a seguir es  aprender a vivir de acuerdo a sus posibilidades.  

¡Cuidado! Si usted no cuenta con los recursos financieros que sí cuentan otros y no puede gastar al mismo ritmo que ellos, no permita que sus hábitos de gastos  rijan los suyos. No se deje influenciar por esas personas que despiertan al Impulsivo u  Osado en usted. Cuando comparta con estas personas, permita que aflore un poco del Básico; haga algo con ellas en lugar de comprar y gastar. Si no puede encontrar otra actividad para compartir, trate de comprar con efectivo limitado y deje las tarjetas de crédito en su hogar.

Necesita conocer en qué gasta su dinero y debe comenzar por  registrar sus gastos y sumarlos.  Esa es  la única forma de enterarse; no existe otra. Los Básicos y los Analistas suelen ser muy buenos realizando esta tarea.  La clave para mejorar su situación financiera a corto plazo es reducir sus gastos, pero si desconoce a cuánto ascienden los mismos  nunca sabrá cuánto se estará economizando.

Intente llevar a cabo el siguiente ejercicio: haga la prueba por 30 días clasificando y anotando  todos sus gastos diarios. Si no los puede anotar al momento de la compra, entonces guarde los recibos, ya sea  en un sobre o en una caja, como usted prefiera, y tómese un tiempo cada 2 ó 3 días para clasificarlos, sumarlos  por categoría y anotar el resultado hasta completado el periodo de 30 días. Cuando realice este ejercicio debe recordar que todo gasto es importante, por pequeño que éste le  parezca. Al finalizar el periodo, analice en qué gastó su dinero y determine a cuánto asciende la diferencia entre su ingreso y  estos gastos. Entonces, responda a la siguiente pregunta, ¿Es esa diferencia suficiente para cubrir el resto de sus gastos y además, ahorrar? Observe que cuando hablo del ‘resto’ de sus gastos me estoy  refiriendo a gastos básicos y fijos tales como  agua, luz, teléfono, cable, internet, alquiler, hipoteca, mantenimiento de su hogar o residencia, pensión alimentaria, préstamos  personales y de auto, tarjetas de crédito, etc.  

Para algunos de ustedes, en especial los Osados, puede ser un gran reto realizar este ejercicio de principio a fin. Piense… ¿Cuál será su ganancia? A corto plazo, su misión será seguirle la pista a sus gastos… para descubrir a dónde se va su dinero y tomar acciones concretas y efectivas para lograr reducir los mismos y,  mejorar  su situación financiera. Ya lo sabe..., ¡sígale la pista a sus gastos y  logre atrapar ese dinero que se le está escapando!

Hasta la próxima…

lunes, 4 de julio de 2011

¿Qué tan buena es su condición financiera?

¿Cuándo fue la última vez que se sentó a hacer un inventario de su situación financiera?

Si usted pertenece al grupo de los Analistas, considerado como uno de los miembros más distinguidos del ‘SABIO de las Finanzas’,  es casi seguro que la última cita que tuvo con sus documentos financieros fue hace menos de un mes. Claro esta, el Analista disfruta proyectando sus finanzas y suele ahorrar disciplinadamente. Es el que al final de cada mes puede decir cuánto dinero le quedará, casi hasta el último centavo. Ahora bien, si usted es Impulsivo o es  Osado, es probable que no sepa lo que es tener una cita con sus documentos financieros y,  muy probablemente, esté confrontando algunas dificultades… El Impulsivo suele creer que es incapaz de ahorrar mientras que al Osado no le gusta planificar sus finanzas. Este último considera que ahorrar dinero en esta época es algo imposible de lograr y muchos de sus gastos los hace de modo casi inconciente.

Recientemente leí un libro en el cual, entre otros asuntos, se trata el   tema relacionado con el ejercicio de sentarnos  a hacer un inventario concienzudo de nuestra situación financiera,    y  me llamo la atención el hecho de que su autor afirma lo siguiente: “Si es como la mayoría de la gente, quizá nunca haya hecho este ejercicio  o ya pasó mucho tiempo desde que lo hizo la última vez.” 

No sé en que se basó el autor para generalizar y afirmar que la ‘mayoría’ de la gente  actúa de ese modo. Hasta que no se  me muestren los datos que evidencien que esto es así, que efectivamente son estos la mayoría,  yo prefiero creer que solo algunos, mas bien unos pocos, no suele hacer este ejercicio que es tan importante y necesario para alcanzar la salud financiera y un balance adecuado en nuestras vidas. 

Luego de revisar alguna literatura con relación a este y otros temas financieros, encontré información de varias actitudes,  al parecer bastante comunes, que tienen que ver con los problemas financieros que suelen confrontar algunas  personas, veamos…

1.      Falta de planificación: Para los que no pertenecen al grupo de los Analistas, planificar sus finanzas no resulta divertido. Un Impulsivo o un Osado probablemente disfrutaría más planificando un viaje de vacaciones  o una actividad para compartir socialmente. Lo que desconoce el Impulsivo o el Osado es que si se sienta a planificar sus finanzas, probablemente podría contar con dinero suficiente para extender sus vacaciones por más tiempo o realizar una actividad en grande, como suele gustarle a los Osados hacer las cosas. Las metas financieras también requieren de planificación.

2.      Gastar demasiado: ¿A donde se va nuestro dinero? ¡Buena pregunta! Si es mujer, y busca en su cartera podría encontrar la respuesta en todos esos recibos de compra que suele ‘archivar’ en la misma. Si es varón, puede que encuentre alguna  evidencia de sus gastos en los bolsillos de sus pantalones y camisas o en los asientos de su auto. La clave para mejorar su situación financiera a corto plazo es reducir sus gastos, pero si desconoce a cuanto ascienden los mismos nunca sabrá cuanto se estará economizando. Necesita conocer en qué gasta su dinero y debe comenzar por  registrar sus gastos y sumarlos.  Esa es  la única forma de enterarse; no existe otra. Los Básicos y los Analistas suelen ser muy buenos realizando esta tarea.


3.      Comprar a crédito: Las tarjetas de crédito o  el  ‘dinero  plástico’ puede que lo induzca a gastar más de lo que tiene. Entérese de que hay metas a las que usted no viene obligado a llegar y,  una de esas metas es el límite de gastos en sus tarjetas de crédito. Investigue que puede hacer para consolidar  las  deudas de todas sus tarjetas de crédito y pagar menos.

4.      Posponer el ahorrar para su retiro: Si usted se ha puesto como meta jubilarse a los 65 años de edad sepa que para lograrlo,  necesita ahorrar una cantidad considerable de sus ingresos desde muy temprano en su vida. Mientras  más se demore en comenzar a ahorrar para su retiro, más difícil será alcanzar su meta. Muchos de los artículos que he leído recomiendan ahorrar como mínimo un 10% de su ingreso. Existen ciertas cuentas que le ayudan a ahorrar para su retiro y cuyas aportaciones están exentas del pago de contribuciones; quizás la más conocida de todas es la  IRA (Individual Retirement Account).


5.      No hacer su tarea: A la hora de conseguir el mejor negocio recuerde antes: comparar, leer las críticas, preguntar, cuestionar y orientarse. Para algunos, no para los Analistas,  tomar decisiones financieras informadas puede llegar a ser una tarea abrumadora. Sin embargo, debe tener presente que esto es algo que no debe dejar de hacer si desea tener el control sobre sus finanzas y saber: a qué se expone, cuáles son los riesgos, qué le conviene más, cuál es el justo valor por sus compras o a quién puede creerle.

6.      Tomar decisiones basadas en los sentimientos: Cuidado, los Solidarios pueden ser muy dados a tomar decisiones basadas en los sentimientos. De hecho puede gastar más dinero en causas nobles que en sí mismo. Inclusive, pueden dar más importancia a las necesidades económicas de los demás que a las propias. Además, si  atraviesa por circunstancias difíciles tales como despido o  perdida del empleo, divorcio, separación, muerte de personas significativas, etc., puede estar muy vulnerable a tomar decisiones financieras equivocadas. Recuerde, es más sabio responder que reaccionar.  Importante,  tómese un tiempo y no se  deje llevar por las emociones.

7.      Falta de protección adecuada: La gente que  no cuenta con una reserva de ahorros o una red de apoyo sólida  para emergencias puede estar muy vulnerable a perderlo todo. Las cubiertas de seguro de todo tipo (salud, vida, propiedad, etc.)  son una buena alternativa para afrontar estos riesgos y emergencias, minimizando así el impacto que las mismas puedan tener sobre sus finanzas. Oriéntese, hoy día existen muchas alternativas y cubiertas que se ajustan a su presupuesto.

8.      Enfocarse demasiado en el dinero: Una persona cuya personalidad financiera lo ubica dentro del grupo conocido como Básico se caracteriza, entre otras cosas, por hacer demasiado énfasis en ganar y ahorrar dinero.  Los excesos nunca son buenos, pues esto puede distorsionar su perspectiva sobre lo que es importante en su vida. Si usted realiza una encuesta entre  varias personas se convencerá de que, salvo algunas excepciones,  el dinero no es la primera ni la segunda prioridad en la vida de esa  persona para ser  feliz. La salud, la relación con la familia y los amigos, el estar satisfecho con su vida profesional haciendo lo que le gusta,  tener intereses gratificantes, y sentirse bien consigo mismo suele ser lo más importante. No se trata de acumular la mayor cantidad de dinero posible, de lo que se trata es de  saber que realmente tienes la cantidad que necesitas. Como diría Julie Stav, autora del libro ¡El dinero que hay en tí!,  En realidad todo consiste en ser feliz con menos, no en ser infeliz porque quisieras tener más.”

Ahora le vuelvo a preguntar, ¿Cuándo se  va a sentar rodeado de todos sus documentos financieros para hacer un inventario de su situación financiera en general, incluyendo una revisión de sus gastos, ahorros, metas futuras y seguros?  No tiene porque temer, cualquiera que sea el resultado considérese un ganador. Este ejercicio le ayudará a detectar la raíz de sus problemas financieros para poder afrontarlos valientemente y de forma realista, si es que los tiene,  y  si no, para saberse en control de su situación financiera.

Hasta la próxima…